La diputada Garci-Crespo, defensora de sus bolsillos
Enriquecimiento ilícito que practica, mueve a diputada a permanecer en política local
Las cuentas bancarias de la diputada han seguido creciendo a costa de la estafa y el enriquecimiento ilícito que ha practicado mientras ha ocupado su puesto como diputada local por el distrito de Tehuacán, Puebla. La política a la que todos conocen por su nombre Olga Lucía Romero Garci-Crespo, que ha usado solo por 11 años de sus más de 30 años de vida. El nombre que legalmente ha mantenido la mayor parte de su vida es Mónica Caballero Garci-Crespo, aunque ahora le pesa y quiere hacer creer a todos que está orgullosa de su nombre, no es más que conveniencia política.
El apellido Romero en Tehuacán infunde admiración y respeto, aunque Caballero no desmerece en absoluto, la diputada decidió rechazarlo, una vez que ya había cobrado la herencia de su padre biológico, don Edmundo Caballero Ortega. Luego de morder la mano de quien le dio de comer, la política contendió con el apellido Romero, porque dice que siempre sí es hija de don Francisco Romero Bringas, con el apellido Romero los electores simpatizaron con ella, y la estrategia le funcionó. Resulta que ganó la contienda y luego una designación plurinominal.
En estos años de servicio público lo único que ha hecho es servirse de su puesto para intimidar y cometer más ilícitos. La figura de la diputada está hecha de cartón, uno muy delgado, por cierto. Corre el rumor que los electores de Morena están muy molestos con el partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador porque las figuras de ese partido siguen con las más viejas usanzas priístas, y se rumora que el castigo se verá reflejado en el voto en los comicios. O sea, que se le acabó su domingo a la diputada.
La gran diferencia entre la empresaria Socorrito Romero Sánchez es que ella trabajó arduamente, día a día, para labrar una de las fortunas más sólidas de México, y además compartió y lo sigue haciendo, después de muerta, sus bendiciones con quienes tenían menos que ella y REALMENTE LO NECESITABAN. Ni siquiera alcanzan punto de comparación estas dos mujeres, de ahí que la Garci-Crespo sostenga esa persecución desmedida por la fortuna de la empresaria avícola y porcícola.
A caso la Lady Demandas alcanzará a engañar a algunos cuántos, porque en Tehuacán ya todos saben que la política cojea por la ambición y el rencor, que el dinero es su único motor, ya nadie la quiere como figura política, ella sola se ha ganado el desprecio de la gente con su mala fama, su deficiente trabajo y su ineptitud.